Poemas

Ahora que sé que eres tú quien toca mi ventana por las noches. Te mantendré letras y galletas para mimarte.

El miedo a volver es lo que nos crea el impulso a quemar los caminos y a eliminar hasta el más minúsculo pálpito que pueda quedar entre las huellas del camino.

Qué le pasa al mundo que solo escupe personas destruidas.

No te preocupes si me enamoro o no. No te preocupes si me rompes el corazón o no.

Hay noches en las que escucho tu voz martillando mis recuerdos.

A mis ojos que me han hecho lo que hoy soy y lo que más problemas me ha traído.

La operación no pudo ser completada. No ha sido posible aceptar la disculpa solicitada porque superó el tamaño máximo permitido.

Reconozco esa mirada esos peligrosos ojos cargados de instinto animal.

Nunca pensé que alguien pudiera hacerme ceniza en tan poco tiempo y bastó con un beso para convertirme en polvo.

En la ausencia total de ti, veo con claridad lo importante que es el silencio para tomar un respiro, una pausa y suspirar por ti.

Prometiste que me dejarías dormir pero en las noches la mitad de mis pensamientos eres tú.